MILA GONZÁLEZ

¡¡¡ Me tocó!!!

Eso fue lo único que pude decir cuando sus palabras fueron…

“Si, tienes dos tumores y son malignos, es cáncer”.

“¿Y cómo se lo digo a mis padres?”.

Ahí llegó el derrumbe…, solo ahí porque el resto no estaba sucediendo… ¿era un mal sueño, una pesadilla?

Si, estaba montada en una nube y mirando desde arriba lo que estaba ocurriendo ahí abajo.

Con mi prima y acompañante durante todo lo que, en ese momento, inimaginable, iba a pasarme, iba a experimentar.

Pero al día siguiente volví a mis clases, con mis niños… Como si nada… Porque “eso” a mí no me estaba pasando…

Y, como nube que pasa tan rápido como la arrastra el nordeste… ya ha pasado todo… o casi todo. Lo peor, como me dice todo el mundo.

Pero… ¿me lo creo aún?

¡¡¡No lo sé!!!

Lo sigo experimentando… ¿asimilando?

Pero… ¡¡¡Si apenas lo recuerdo!!!

Me quedo con todo lo bueno… la fortaleza te sale, no sé de dónde… Salir con mis amigas que me llevaban a todas partes para que saliera y es que ¡¡¡tenía muchas ganas!!! Nunca estuve tan malita como para que no me apeteciera… Los cientos de muestras de cariño por parte de mucha gente… Volver a sentir los cuidados en el seno familiar.

Y ya hace un año de todo eso…

A veces me sorprendo a mi misma reflejada en un espejo o un escaparate y… no me reconozco. No me acuerdo que tengo el pelo corto, ¡¡¡muy corto!!!