¿Qué son?
Clubes de Servicio tradicionales existen en casi todos los países del mundo. Estos pertenecen a federaciones que administran y gestionan sus estructuras y normas organizativas, comunes en todos los grupos pertenecientes a la misma asociación; de esta forma se constituye la plataforma para que los encuentros y proyectos realizados entre las distintas sociedades puedan llevarse a cabo de forma eficiente.
Su historia comienza a principios del siglo pasado en EEUU. En aquella época eran muy habituales los círculos de negocios, donde rápidamente los empresarios y las personas relevantes vieron que servir y/o ayudar a los demás, era algo necesario y muy interesante desde el punto de vista del prestigio personal y de la percepción ofrecida al mundo.
Los más conocidos internacionalmente son los clubes Civitan International, Zonta International, Rotary International, Kiwanis international, Lions, Altrusa, Optimist, Soroptimist, Ambassador Club, etc. Existen otras organizaciones, asociaciones, ONG, etc.., que no pueden englobarse dentro lo que representan los clubes de servicio.
Todos ellos coexisten con los clubes online o virtuales que utilizan la red y las redes sociales como medio de comunicación entre sus socios. Son una plataforma idónea de reunión que ayuda a la formación y permite estar en contacto.
¿A qué se dedican?
Este tipo de agrupaciones organiza y desarrolla iniciativas humanitarias, sociales, empresariales o filantrópicas de grandes dimensiones que no podrían ser soportadas por personas o clubes individuales.
Dependiendo del tamaño del club, pueden darse niveles adicionales de jerarquía; si es muy extenso se dividirá en varios clubes dando lugar a los llamados distritos, cuyas dimensiones en muchos casos se sitúan entre las de una región y un grupo de estados. Estos distritos rara vez se corresponden con territorios políticos o administrativos.
¿Quiénes forman parte?
Para formar parte de un Club de Servicio, existen normas estipuladas que permiten presentar la solicitud de acceso. Cada organización elige a sus propios miembros, generalmente pertenecientes al área geográfica que compete al club. En la mayoría de los casos, es un miembro del club quien presenta una propuesta para que un candidato entre a formar parte de la entidad, y sólo en caso de que haya unanimidad en la aceptación por parte de los socios, el candidato puede entrar a formar parte del club. Una condición importante para el ingreso son las inquietudes que mueven a la persona para afiliarse, estas deben concordar con el espíritu y los valores de la organización. Los miembros no pertenecen a la organización internacional, sino que lo son de un club local individual.
Interesa que se dé variedad multidisciplinar entre los miembros, reflejando en lo posible a todos los sectores profesionales presentes en la zona; además, esta diversidad ofrece a cada socio la posibilidad de incrementar su cartera de contactos, aprender sobre otras profesiones, conocer experiencias y carencias en otros sectores, o generar sinergias que puedan dar lugar al desarrollo de proyectos.
La ética personal y profesional, la disposición para colaborar y prestar servicios en favor del prójimo, y la tolerancia son valores que caracterizan a los socios de los clubes de servicio; contrariamente al prejuicio generalizado, unos ingresos o patrimonio particularmente grande, que permitirían sustanciosas donaciones, no son un criterio para la admisión. De otro modo, los grupos con mayor nivel de formación están presentes en este tipo de clubes en una proporción muy superior al equivalente en la población general.
¿Qué son y qué se hace en las reuniones?
La celebración de reuniones es una práctica importante dentro del club, ya que en ellas se fomenta la amistad entre los miembros, elemento esencial de la vida del club. En ellas se habla de los problemas que afectan a la sociedad cercana al club y a la global, y por supuesto, de los proyectos en desarrollo. A menudo, una actividad interesante en ellas son las conferencias que corren a cargo de los miembros, o de conferenciantes invitados. La participación en las reuniones, en principio, es obligatoria. Cada formación es libre de decidir cómo es de estricta y cuánto controla la asistencia, pudiendo darse la expulsión de un miembro por parte del club si considera que es insuficiente.